SINOPSIS (1ª Historia):
La historia comienza con el Hombre Gigante y la Avispa que se encuentran en un club de fans proyectando imágenes de su anterior victoria contra la Peonza Humana, la cual se había producido recientemente gracias a la astucia de Henry Pym toda vez que reconoce la imposibilidad de alcanzar la misma velocidad que tenía su oponente.
Precisamente, en ese momento, en el presidio dónde cumple condena se produce la fuga de la Peonza Humana, libertad conseguida por medio de su gran velocidad que lo oculta al ojo de sus captores. Ya fuera, retoma sus fechorías, por lo que la Avispa y el Hombre Gigante se aprestan a detenerlo nuevamente. En el lugar del crimen, son informados de que la Peonza Humana ha huido, por lo que deciden volver a casa sin percatarse que son seguidos por el villano.
Aprovechando la sorpresa, la Peonza Humana irrumpe en el hogar de los dos héroes y tras una breve lucha, impide a Pym el acceso a sus píldoras para cambiar de tamaño así como para encerrarlo, procediendo seguidamente a capturar a Janet con la que escapa así como con varias píldoras de Pym.
No pudiendo salir del lugar que está encerrado, Pym utiliza su casco cibernético para ordenar a las hormigas que le traigan unas píldoras de reserva, para así ir en pos de la Peonza Humana y su cautiva.
Sin embargo, se encuentra con el gigantesco Peonza Humana, que ha tomado una píldora para hacerse gigante, por lo que Pym inicia la lucha pero siendo consciente de que no puede vencerle dada la velocidad de su oponente. La solución es mandar a la Avispa a que contacte con unas termitas y debilitar una parte del tejado, por lo que cuando la Peonza Humana arremete contra el Hombre Gigante el tejado se hunde y consecuentemente se produce la derrota del villano que nuevamente acaba entre rejas.
SINOPSIS (2ª Historia):
En el laboratorio de Henry Pym, esté está enfrascado en una de sus investigaciones mientras la Avispa le pide que deje los tubos de ensayo porque, aunque encuentre lo que busque, no se va a sentir satisfecho. Eso despierta la curiosidad de Pym y le pide que se explique, por lo que Janet le cuenta la historia titulada “El secreto del gitano”.
En Europa, un viejo gitano llamado Gorko conoce el secreto para transformar el plomo en oro. A pesar de ello, solo lo utiliza para su subsistencia en su vida nómada y errante con una caravana en busca de algo que no logra encontrar.
Un día, tiene un accidente y pide ayuda en un castillo cercano. El barón Radzik es el señor del castillo y ordena que echen al gitano cuanto antes, pero los sirvientes le informan de que posee oro con el que pagar. Cegado por la avaricia, el barón le acusa de robarlo y le exige que se lo entregue todo, pero Gorko replica que no lo ha robado sino que lo creado por medio de la alquimia, afirmación que supone su inmediato encierro hasta que revele su secreto.
El pobre Gorko, finalmente, cede y se lleva al barón a su carromato, en dónde se vuelven las tornas y es el turno del barón para ser encerrado. Para su horror, el carromato se revela realmente como una nave espacial que despega hacía el espacio. Gorko se despoja de su apariencia humana e informa al barón de que su larga búsqueda se debía a la necesidad de encontrar un humano al que llevar al zoo de su mundo, pero buscaba alguien al que no se le echara de menos siendo que hasta ese momento no había encontrado a nadie. No obstante, Gorko reveló al barón que su codicia se vería colmada, dado que en su mundo el oro no tenía valor ninguno por ser el más común de los metales.
Y así, Janet se ufana de que Pym nunca se sentirá satisfecho, pero para su desesperación lo único que consigue es que Pym deje la investigación en curso para retomar otra relativa a la alquimia.
RESEÑA (1ª Historia):
El guión no aporta nada original y sigue un esquema bastante repetido, que podemos resumir en tres actos.
El primer acto se refiere a contextualizar la historia aportando la presencia de los dos héroes, presentando el villano y procediendo este a la consabida fuga de la cárcel. Como cuestión curiosa, volvemos al sempiterno recurso de los presidios de aquella época (aunque casi diría de todas las épocas), en los que parece más práctico poner puertas giratorias en vez de barrotes. En este caso, lo destacable es que la fuga se produce porque la Peonza Humana gira a una velocidad tal que lo hace imperceptible al ojo humano. Personalmente, no me acaba de convencer tal recurso, pero bueno tampoco vamos a ser quisquillosos. Total, casi me convence más que el habitual recurso de que el preso estaba trabajando en el taller de la cárcel y se construyó un ingenio que le permite escapar.
Sobre el villano, tenemos al mencionado Peonza Humana que básicamente es eso, un tío que tiene una peonza como casco y que gira de forma endiablada. Posiblemente uno de los mejores villanos del Hombre Gigante y la Avispa, pero claro, eso tampoco es muy meritorio.
Puestos los actores en escena, toca la apertura del segundo acto, que básicamente es la primera confrontación y poner a los héroes en apuros. Lo más reseñable es que el Hombre Gigante y la Avispa llegan al lugar del reciente robo del villano, pero este ya huyó. Toca volver a casa y deciden hacerlo dando un paseo que al fin y al cabo así les da el aire.
Aprovechando que la ocasión la pintan calva, la Peonza Humana les sigue para vengarse de su anterior derrota, por lo que irrumpe en casa y, evidentemente, logra una fácil derrota teniendo en cuenta que con su velocidad impide a Pym tomar sus píldoras y a Janet la encierra en un bote de cristal (bastante tópico pero efectivo). Indicar que la escena no está mal y está bien resuelta, no en vano en un espacio cerrado no es probable que uno pueda defenderse contra un tío que gira sin cesar a mucha velocidad. La huida de Pym del lugar en el que está encerrado es tópica, usando las hormigas, pero bueno tampoco está mal pensada.
Y, finalmente, el tercer acto, la lucha final. En este caso, nos encontramos a la Peonza Humana en tamaño gigante luchando contra el Hombre Gigante. Duelo de titanes…muy mal narrado. Apenas unas viñetas muy mal desarrolladas en las que en ningún momento da la sensación de que estén luchando dos colosos de gran tamaño. Y la resolución de usar las termitas para debilitar el tejado, pues no me parece gran cosa pero es un final plausible.
Ya finalmente, en la parte gráfica no me acaba de convencer el dibujo, especialmente empeñado en primeros planos y flaqueando mucho en la parte de la lucha final, al carecer de objetos de fondo que sirvieran de referencia para que se viera el tamaño gigante de héroe y villano.
Por parte de Stan Lee, una historia muy de su estilo, no aporta nada original, pero tampoco es horrible. Más reseñable es el tratamiento de la pareja protagonista. Janet es la alegre muchacha enamorada de Pym que no se toma nada en serio y solo quiere divertirse y estar con su enamorado. Por supuesto, es la damisela a la que hay que rescatar y apenas tiene intervención en la derrota del villano siendo que simplemente les dice a las termitas que debiliten una parte del tejado…pero porque se lo pide Pym.
Respecto a Pym, es el serio, el que se toma su trabajo a pecho, el que tiene que rescatar a Janet y el que se enfrenta al villano y lo vence. Ambos roles no son nuevos, y en esta colección se ha visto en otras ocasiones, pero nunca está de más indicarlo.
RESEÑA (2ª Historia):
La Avispa y el Hombre Gigante son una mera excusa o vehículo para contarnos uno de esos relatos breves tan marca de la casa en aquella época. Son apenas cinco páginas con el típico cuento de pequeña moraleja y que, realmente, no hay mucho que valorar porque apenas hay desarrollo, y la parte artística suele ser bastante discreta.
En este caso, tenemos un viejo gitano que conoce el secreto para transformar el plomo en oro, una de las fábulas que dieron lugar a multitud de historias y cuentos populares. Dado el breve espacio para hacer una narración más compleja, los personajes están polarizados al máximo. Por un lado, el bondadoso gitano carente de avaricia y, por otro, el barón que está consumido por la misma. El final no coge por sorpresa a nadie y está bastante visto en otros relatos cortos que hemos leído en esa época.
VALORACIÓN GLOBAL:
No nos vamos engañar, esta colección posiblemente sea de las más flojas de la época y tampoco hay nada especialmente destacable en este número. Se cumple con el trabajo de sacar el número en plazo y bueno, tampoco es que sea especialmente horrible. Quizás con una mejor representación gráfica de la lucha final el resultado hubiera mejorado, pero no en exceso. Sirve simplemente para seguir las aventuras de los protagonistas y, en menor medida, retomar a un villano de su galería.
Respecto a la segunda historia, cumple con su función de relleno para completar el número. No hay mucho más que contar que lo ya expuesto en la reseña.