EQUIPO CREATIVO:
Guión: Stan Lee
Dibujo: Steve Ditko
Entintado: Steve Ditko
SINOPSIS:
El Doctor Extraño recibe la llamada de auxilio de Sir Clive Bentley, solicitando que venga a verle el hechicero lo antes posible, aunque en una escena posterior descubriremos que realmente se trataba del Baron Mordo. Ante la necesidad de un amigo, Extraño acude raudo a la mansión de éste, situada en Londres. Al entrar en ella, nota algo raro, pero ya es tarde. Ha caído presa de unas velas, cuyo vapor lo deja paralizado, mientras le succiona la vida. Una vez ha caído en la trampa, se revela Mordo como autor de la misma, dejando al mago solo para que se debilite con el fin de acabar con él más tarde. El Anciano observa la difícil situación de su discípulo, pero éste decide que debe demostrar sus avances en la hechicería, salvando la situación por sí mismo. De esa forma, utiliza su amuleto para proyectar sus pensamientos y contactar con alguien que le pueda ayudar. Cerca de allí, se encuentra Victoria Bentley, que oye la llamada mental del hechicero, siendo poseída por su poder. Así, la chica llega a la casa donde está atrapado Extraño y apaga las velas que lo retienen. Al momento, despierta de su hechizo, revelando que es la casa de su padre muerto, algo que sorprende al mago. En esos instantes, aparece Mordo, que muestra su poder controlando a Extraño, pero posteriormente se descubre que no era más que una imagen proyectada del hechicero, mandada por él mientras realizaba el viaje en avión a Londres. Ambas figuras se unen para medir sus fuerzas con el Barón Mordo en un enfrentamiento que se produce en la Dimensión Mágica. Finalmente, Extraño consigue derrotar a su adversario. Victoria, que estaba presente, oye hablar de un talento latente que posee para la magia, y le pide al mago ser su discípula. Éste rehúsa su petición, aludiendo que estaría en peligro ante la amenaza de Mordo, con lo que debe esperar un poco. Al final, Extraño se reúne con el Anciano, que le insta a mejorar en su conocimientos de hechicería, ya que Mordo es aún más poderoso que él.
A partir de este número, las aventuras del Dr. Extraño tendrán cadencia mensual, convirtiéndose en otra serie regular.
Primera aparición de Victoria Bentley.
Segundo enfrentamiento con el Barón Mordo, el cual sigue siendo más poderoso que el Dr. Extraño.
En esta historia es la primera vez que se le da el nombre de Anciano al mentor de Extraño, hasta ahora solo se le mencionaba como Maestro.
RESEÑA:
Este número supone un hito dentro de la historia de nuestro protagonista de hoy. En esta ocasión, tras el tanteo del público con los dos números anteriores, el Dr. Extraño ha venido para quedarse. Estamos ante el arranque de una nueva serie regular, que irá cogiendo cuerpo poco a poco, a pesar de que se inicia con unas escuetas cinco páginas. A pesar del hándicap que supone no tener ni una triste mención en la portada. Desde luego, está lejos de las fanfarrias propagandísticas de otros personajes. Posiblemente, porque en este número, precisamente, no se puede competir con el evento que supone el regreso del Capitán América, como vimos en la anterior reseña, pese a que no era del todo real. La inclusión de Extraño en las cubiertas, tardaría un tiempo en materializarse, ya que el personaje no aparecería en las portadas hasta
Strange Tales #118. Y, entonces, solo lo haría con una triste banda dibujada por Steve Ditko. En fin, me parece, cuanto menos, curioso.
Puede parecer que cinco páginas no dan para mucho (imaginaos para hacer una reseña decente), pero es cierto que, en aquella época, los espacios estaban muy bien aprovechados. De esa forma, Stan nos mete en situación desde la primera viñeta. Una llamada de socorro; un juramento que le obliga a nuestro protagonista a auxiliar a todo aquel que lo necesite; y una revelación para que nos preparemos ante la inminente celada. Todo en solo tres viñetas.
Como digo, todo avanza de forma bastante acelerada. Tanto es así, que Extraño llega rápidamente a Londres. En las primeras escenas, Ditko se recrea en las penumbras y con un escenario un poco tétrico. Casi podemos confundir al mago con el Conde Drácula en algunas viñetas.
Nada más entrar en la solitaria casa de Bentley, el mago acaba preso de unos enormes cirios que expelen un extraño vapor que lo paraliza. Llega el momento de que entre en escena el villano de la historia; el cual podemos empezar a considerar como la némesis de nuestro protagonista. Lo realmente curioso, es que tras la presentación de la situación, a Mordo no se le ocurre otra cosa que marcharse para volver luego, cuando el extraño humo haga su trabajo. ¿A ningún villano se le ocurre que el apresado pueda escapar?
No termino de verle la lógica a este modo de proceder, la verdad, pero el caso es que una vez solo el mentor de Extraño se ofrece a sacarle de su situación.
Aquí, nuestro héroe demuestra entereza, decidiéndose por el camino complicado del aprendizaje. No olvidemos, que el personaje tiene cierta reminiscencia oriental en sus inicios. Por lo tanto, debe mostrar un afán de superación constante en un camino, casi iniciático, que le debe llevar a ser el Hechicero Supremo. Esto se cultiva con este tipo de situaciones, pero se irá volviendo más complejo a medida que avance la serie y el desarrollo del personaje.
No obstante, la liberación de Extraño se produce por una combinación de magia y ayuda terrenal. Es cierto que la persona que le ayuda es totalmente controlada por su mente, pero, aún así, no supera la prueba utilizando solo la magia. De hecho, al final, el propio Anciano le recalca cuanto debe esforzarse para estar a la altura de Mordo, que en esos momentos está a un nivel muy superior al suyo. No es una derrota totalmente pírrica, pero queda patente que el personaje, y sus poderes, están en constante evolución. Algo muy importante para ir comprendiendo que clase de protagonista nos vamos a ir encontrando en este serial.
Con la ayuda del exterior, hace su primera aparición Victoria Bentley.
Una joven que vive a pocos metros de distancia y que parece tener un talento oculto para la magia. Al descubrir que su padre es el amigo del Dr. Extraño, encaja un poco mejor la situación que propicia la entrada en escena de la muchacha. A pesar de su somera actuación en esta historia, el personaje será recuperado años después para convertirse en un secundario de la serie. Curiosamente para ayudar a Clea, que se convertiría en discípula de Extraño, algo que ella solicita aquí, pero no lo consigue.
Posteriormente, su ubicación geográfica la acabará ligando al Caballero Negro y el componente mágico que lo rodea. Aunque también se le añadirán ingredientes románticos a un personaje bastante liado en aquellos momentos, pese a que con el triángulo amoroso que protagonizaba en Los Vengadores, tenía más que suficiente. Y no me extraña nada, la verdad.
Tras las debidas presentaciones, vuelve Mordo, junto a sus ansias megalómanas, y comienza a hacer gala de sus extraordinarios poderes. Aquí, Stan me ha despistado del todo, ya que no pensaba que lo que llevábamos viendo desde casi el principio de la historia era una imagen proyectada mentalmente. Desde luego, el amuleto hace que los poderes de Xavier queden a la altura del betún. Una vez cohesionado el cuerpo de Extraño, puede comenzar la batalla.
Ditko está lejos de las genialidades que mostrará en esta serie, pero nadie puede decir que al autor no apunta maneras desde el principio. No es que fuera un novato, ni mucho menos, pero tenderá a hacer suyo al personaje, lo que provocará mucha creación desbordante. De momento, todo parecen escenarios de película de serie B, pero a pesar de la sobriedad del autor, llegaremos a ver cierta majestuosidad en la representación mágica. Y sobre todo, una sensación de estar al borde de lo imposible. La magia de verdad, está por llegar.
VALORACIÓN:
Tengo que reconocer que no soy imparcial a la hora de valorar estas historias. Tanto el personaje como la temática son una debilidad mía desde que era pequeño. Quizá la única pega sería la rapidez con lo que pasa todo. Incluso puede parecer algo apresurado. Hay ideas que rozan el absurdo y son demasiado simplistas, pero es que desarrollar una historia en cinco páginas ya me parece toda una proeza. A mí, me parece un relato tremendamente divertido. Además, cualquier posible error queda tapado por la fluidez de la narrativa y lo entretenida que resulta la lectura. Para mí, uno de los trabajos cumbre de Ditko, un autor que me gusta mucho. Por lo tanto, solo puedo recomendar esta historia, y, posiblemente, todas las siguientes, porque es que incluso el tiempo no ha sido demasiado cruel con ellas. Por último, un pequeño detalle que no he comentado antes. El Dr. Extraño, queda presentado como el maestro de la magia negra. No sé si es un error de la traducción de la Biblioteca Marvel, pero posteriormente sería cambiado por el epítome de maestro de las artes místicas. Entiendo que la magia negra se ve, a priori, como algo malo, mientras que lo otro suena mucho mejor. La verdad, es que no me había fijado hasta hoy en ese pequeño detalle.
