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por Victor Dolz
Datos Importantes: - Total de cómics editados: 77 - Series nuevas: The Amazing Spider-Man, Sgt. Fury & His Howling Commandos, The Avengers, The X-Men. - Series canceladas: The Incredible Hulk. - Principales personajes nuevo: Pete Pote de Pasta, Tyrannus, Hombre Imposible, Willie Lumpkin, J. Jonah Jameson, John Jameson, Camaleón, Iron Man/Tony Stark, Brigada Juvenil, Fantasma Rojo, Supersimios (Mikhlo, Igor, Peotor), el Vigilante/Uatu, Buitre, Chapucero, Nick Furia, Dum Dum Dugan, Gabe Jones, Robert "Rebelde" Ralston, Johnatan "Junior" Juniper, Isadore "Izzy" Cohen, Dino Manelli, Sam "Happy" Sawyer, Avispa/Janet Van Dyne, Pensador, Asombroso Androide, Sersi, Hombre Radioactivo, Doctor Octopus, Doctor Extraño/Stephen Extraño, Wong, Anciano, Pesadilla, Barón Mordo, Superskrull, Dorrek VII, Hombre de Arena, Betty Brant, Anguila, Harold "Happy" Hogan, Virginia "Pepper" Potts, Jack Frost, Krang, Merlín/Maha Yogi, Profesor X/Charles Xavier, Cíclope/Scott Summers, Hombre de Hielo/Bobbie Drake, Ángel/ Warren Worthington III, Bestia/ Hank McCoy, Chica Maravillosa/ Jean Grey, Magneto, Puercoespín, Rama-Tut, Dorrie Evans, Hombre Planta, Dinamo Carmesí/Anton Vanko, Harrington Byrd, Surtur, Ymir, Lagarto, Hombre Molécula, Victoria Bentley, Fundidor, Fantasma del Espacio, Cobra, Pamela Hawley, Desvanecedor, Trompo Humano, Aborrecedor y Mr. Hyde. - Personajes recuperados de la Edad de Oro: Lady Dorma, Leonard McKenzie, Princesa Fen, Emperador Thakorr. - Acontecimientos importantes: Valoración de Óscar Rosa Jiménez: ¡Cómo pasa el tiempo! Ya estamos aquí de nuevo para valorar otro año completo de los inicios del Universo Marvel. En este caso, se trata de 1963, el segundo año de vida del universo de ficción que diera comienzo en Fantastic Four #1. Pese a la corta vida del Universo Marvel, comienzan a detectarse los primeros momentos de evolución en un escenario que acabará siendo compartido de forma coordinada por todos los personajes que hemos ido conociendo. Poco a poco, se da un paso hacia delante en la complejidad de las tramas, se realizan historias de más de un número de extensión y se prodigan los cameos. Incluso se ve un pequeño atisbo de lo que posteriormente se conocerá como la retrocontinuidad; una herramienta más para que uno de los universos de ficción más importantes del cómic americano esté perfectamente cohesionado. Uno de los ejemplos más claros lo tenemos personificado en Nick Furia y Reed Richards, aunque en el serial del Dr. Extraño también tendremos este tipo de recurso narrativo. Por otro lado, como cualquier universo en expansión, hemos asistido a nuevas creaciones de personajes como el Trampero, el Hombre Imposible, el Fantasma Rojo y sus Supersimios, eso solo en el apartado de los villanos. Además, algunos supervillanos regresan y comienzan a tomar relevancia dentro del Universo Marvel. Un buen ejemplo de ello es el regreso del Mago, quien nos presenta una muestra de lo que más tarde conoceremos como los 4 Terribles. Quizá el ejemplo más representativo sea el Dr. Muerte que, poco a poco, se va perfilando como la némesis definitiva de la Primera Familia, incluso comenzará a ampliar sus actividades a otras series. No obstante, tenemos que resaltar la aparición de nuevas colecciones y personajes de una verdadera relevancia en el futuro más inmediato de la editorial. Precisamente en el mes de marzo, tenemos la primera aparición de Iron Man y el primer número de la serie regular de Spiderman. El primero ligado a los incombustibles comunistas y su Guerra Fría, pero el segundo supondrá un importante revulsivo a la hora de concebir a los superhéroes adolescentes. Por si fuera poco, Spiderman se convertirá en el buque insignia de Marvel. Aunque nace en una cabecera genérica como Amazing Fantasy, anteriormente Amazing Adult Fantasy, rápidamente obtiene su propio título comenzando desde el codiciado número uno, algo que el propio vengador dorado tardaría mucho en obtener. Tampoco habría que olvidar la serie de Nick Furia y sus Comandos Aulladores, la cual, pese a centrarse en un tema a priori no demasiado interesante, resulta ser una agradable sorpresa. En el apartado de estrenos no podemos olvidar el trágico origen de la Avispa y su posterior asociación con el Hombre Hormiga, cuya colección comienza a presentar ese sello inconfundible del constante cambio. De hecho, este mismo año asistimos a su primer cambio importante, ya que Pym adopta su identidad de Hombre Gigante, poco después de fundar los Vengadores; otra de las series que se estrena este año, a rebufo de la JLA de DC. Por último, me gustaría destacar el nacimiento del concepto mutante con la llegada de los X-Men, algo que tardaría mucho en convertirse en el fenómeno que es hoy en día; el repunte de calidad en Journey Into Mystery, gracias a un serial titulado Tales of Asgard, la Biblia del Universo Marvel al estilo nórdico; el primer anual de los 4 Fantásticos, un nuevo concepto que se trasladará a todas las series; y la tímida introducción del Dr Extraño y lo sobrenatural en el Universo Marvel. Todo ello, es más que representativo del crecimiento exponencial que estaba viviendo la editorial, pero que no ha hecho más que empezar. ¡Nuff said! Valoración de Iván Álvarez: Para mí, 1963 es el año en que empieza el Universo Marvel propiamente dicho. Hasta ahora se habían publicado series independientes, con la salvedad del serial de la Antorcha, que compartía personajes pero venía a ser otra serie protagonizada por el mismo personaje con pocos puntos en común, incluso tenía identidad secreta, mientras en los 4 Fantásticos era pública. Ahora los personajes han empezado a cruzarse, héroes y villanos de una serie han aparecido en otras, y se ha diferenciado claramente entre las series que estamos reseñando aquí y el resto, que quedan fuera de este universo (hasta que Steve Englehart diga lo contrario). Por un lado, la Antorcha Humana es sin duda el personaje con más apariciones en este periodo, pese a que no tiene serie con su nombre. Spiderman acaba el año como el único personaje de este universo que tiene una serie con su nombre exclusivo en portada, aunque Sgt. Fury aparece con ese nombre en la mancheta. Sgt. Fury en este momento era la única serie de este universo que no estaba protagonizada por superhéroes. Incredible Hulk es la única serie que ha cerrado en 1963, la única escrita por Lee y Kirby en el Universo Marvel que tendrá este deshonor. Ninguna otra serie cerrará hasta 1968 (Spectacular Spider-Man) y será por motivos de distribución. Este periodo sin cierres también provocará que Marvel no cree series nuevas por un acuerdo con Independent News (la rama distribuidora de la DC) para aprovechar su distribución a cambio de publicar un límite de series. En 1963 (tomando fechas de portada) hemos visto el nacimiento de cuatro series (Amazing Spider-Man, Sgt. Fury, Avengers y The X-Men), sin contar cambios en series genéricas que han pasado a publicar seriales de superhéroes (Iron Man y Doctor Extraño). De las series que publicará Marvel hasta 1968 sólo falta Daredevil, la única novedad de 1964 en cuento a cabeceras (sí que habrá altas y bajas en los seriales que se publican dentro de las series genéricas). Ese 1968 Marvel no renueva su acuerdo con DC para publicar más series. Stan Lee quiere estar en todas partes y se nota la diferencia entre las series por las que tiene especial predilección (Fantastic Four, Amazing Spider-Man, Sgt. Fury) y el resto. El periodo comentado en que deja de crear series nuevas le permitirá centrarse en labores creativas y dar un nivel más regular, pero todavía no hemos llegado ahí. Jack Kirby también está demasiado centrado en labores de creación de personajes y no da el nivel que sabemos que dará más adelante, cuando su creatividad se vuelque en las series que dibuja. Steve Ditko es el caso contrario. Centrado como está principalmente en una serie y un serial (Amazing Spider-Man y el serial del Doctor Extraño), aún tiene tiempo de cubrir huecos aquí y allá, haciendo un trabajo memorable. Don Heck, probablemente el otro autor importante de esta época. No aguanta la comparación con Kirby o Ditko, pero es un año importante para él, en que es el elegido para definir la imagen gráfica de Tony Stark. Martin Goodman casi parece el villano de la historia: "culpable" de que Lee no pudiera escribir antes su serie sobre un adolescente con poderes arácnidos, su excesiva preocupación por los títulos de las series provocó uno de los más extraños (por no decir feos) que se pudiera ver en un cómic, fruto de una apuesta con Stan Lee: Sgt. Fury and his Howling Commandos, nada menos. Por lo menos en la mancheta lo dejaron en Sgt. Fury. Seguro que es responsable de muchas otras cosas, pero este año es recordado por dos desaciertos. Repaso de las series: A continuación, voy a tratar de hacer un repaso general de todas las colecciones en 1963. En estos casos es casi imposible ser objetivo del todo (a pesar de haberme repasado las distintas reseñas para conocer las impresiones generales de todos los números), así que estaré encantado[3] es más, os animo a ello, si vosotros mismos ponéis vuestras preferencias. La serie troncal del naciente Universo Marvel se ha mostrado como la más sólida a lo largo del año. En las 12 entregas de 1963 hemos visto nacer conceptos tan interesantes como la Zona Azul de la Luna o el Microverso, se nos han presentado nuevos villanos icónicos como el Pensador y el Superskrull y hemos visto como el Amo de las Marionetas o un, cada vez más interesante, Doctor Muerte volvían a las andadas.
Stan Lee y Jack Kirby, acompañados durante casi todo el tiempo por un competente Dick Ayers al que al final ha sustituido un nada adecuado George Roussos, han seguido desbordando imaginación en una colección que seguirá yendo a más en 1964. Pero como nadie es perfecto, tenemos esa gran mancha que supone el, por momentos, deplorable uso de la Chica Invisible como mero florero al que poner a limpiar.
En cuanto a la calidad de las historias, en mi caso personal coloco a dos por encima del resto. Por un lado la primera aparición de Rama-Tut (Fantastic Four #19), un relato endiabladamente divertido que no puede contener más buenas ideas y acción en menos páginas. Por el otro, excelente primer Annual de la serie, una pequeña joya que directamente me parece posiblemente lo mejor del año en general.
Entre otras historias a destacar, podemos mencionar el intercambio de mentes entre Reed Richards y Victor Von Muerte (Fantastic Four #10), el simpático número del Hombre Imposible acompañado de un alegato a favor de Sue (Fantastic Four #11) y los entretenidos debuts del Pensador y el Superskrull (Fantastic Four #15 y Fantastic Four #18). Otras historias, a pesar de se entretenidas, podrían haber dado mucho más de sí, como el algo apagado primer encuentro entre personajes (Fantastic Four #12), el debut de Uatu combinando ideas muy interesantes con un anti-comunismo demasiado maniqueo (Fantastic Four #13), el primer atisbo de historia-río con el Doctor Muerte como villano principal (Fantastic Four #16 - Fantastic Four #17), o la primera aparición de un enemigo extremadamente poderoso (Fantastic Four #20).
El año para el Hombre Hormiga comenzó de la mano de Larry Lieber, algo que como hemos ido viendo no es para alegrarse mucho. Escarabajos megalómanos (Tales to Astonish #39), ataques de apendicitis (Tales to Astonish #40) y comunistas por todas partes eran la tónica habitual de una serie de historias a las que la llegada de un competente Don Heck no ayudó en exceso.
De este primer semestre destacan sobre todo las historias con la Voz (Tales to Astonish #42) y el Amo del Tiempo (Tales to Astonish #43), las únicas que ofrecen unos villanos diferentes pero que tampoco daban para mucho más.
En junio, se produjo uno de los dos grandes cambios del serial y conocimos por primera vez a la Avispa (Tales to Astonish #44), en una historia mucho más madura y seria de la habitual, y que nos brindó la oportunidad de conocer el pasado de Henry Pym. Por importancia y calidad, probablemente el mejor número de todo el año.
Tras una serie de números insulsos con amenazas anecdóticas como el Cíclope (Tales to Astonish #46) y Trago (Tales to Astonish #47), además del debut del Puercoespín (Tales to Astonish #48), llega el segundo gran cambio y Pym pasa a ser el Hombre Gigante (Tales to Astonish #49). Apenas hemos visto el comienzo de su andadura como tal, pero por ahora la llegada de amenazas como el Trompo Humano (futuro Torbellino) ((Tales to Astonish #50) es prometedora. 1964 decidirá[3]
La serie que durante todo 1963 hemos acompañado de incesantes "Ya queda menos para lo bueno".
Mafiosos (Journey Into Mystery #89), Loki por todas partes como pollo sin cabeza (Journey Into Mystery #88, (Journey Into Mystery #91, (Journey Into Mystery #92, (Journey Into Mystery #94), duplicados de Thor (Journey Into Mystery #95) y el esperpento hecho cómic (Journey Into Mystery #94, para mí lo peor del año), todo ello combinado con guiones de Larry Lieber o Robert Bernstein y dibujos de Al Hartley o Joe Sinnott (con mucho oficio este último, eso sí) forman un cóctel molotov que han convertido a este título en uno los más pobres de todo el año.
Los números mas agradables de leer son aquellos con participación de Lee y Kirby, que a pesar de todo no han logrado aun asentarse definitivamente en la serie. El Hombre Radiactivo (Journey Into Mystery #93), el Hombre de Lava (Journey Into Mystery #97) y Mr. Hyde (Journey Into Mystery #99) hacen presagiar tiempos mejores.
¿Lo más destacable? Sólo tres palabras: Relatos de Asgard. Las cortas historias de complemento a cargo de Lee y Kirby son de lo mejorcito que hemos podido disfrutar, pero han llegado muy tarde y tan solo podemos considerar tres de ellas. El año que viene todo comenzará a ser diferente.
Johnny Storm sigue protagonizando su serial en esta colección, y si de algo puede presumir es de mantener una cierta regularidad en la calidad de sus historias. Lamentablemente dicha calidad no es que sea muy alta, pero es preferible eso a estar constantemente subiendo y bajando y a pesar de ello no dar con la tecla. Lee, Kirby, Larry Lieber, Robert Bernstein, Dick Ayers e incluso uno de los padres de Superman, Jerry Siegel bajo el pseudónimo de Joe Carter han sido el grueso de autores encargados de las historias.
Destacan las primeras apariciones de personajes como Pete Pote de Pasta (Strange Tales #104), Anguila (Strange Tales #112), el Hombre Planta (Strange Tales #113), así como el germen de los 4 Terribles con la alianza entre el futuro Trampero y el Mago (Strange Tales #110).
Casi todo el resto oscila entre lo pasable y lo entretenido sin más, como el primer regreso del Mago (Strange Tales #105), el curioso debut del Hombre de Amianto (Strange Tales #111) o la ocasión en que el Acróbata se hace pasar por el Capitán América (Strange Tales #114).
A pesar de todo no se libra de tener números rematadamente malos, especialmente en el período primaveral, con un insulso enfrentamiento contra Namor (Strange Tales #107) o los poco amenazantes Pintor (Strange Tales #108) y el Brujo (Strange Tales #109). A destacar también el cierre del año, con el extrañísimo enfrentamiento contra el Hombre de Arena (Strange Tales #115).
Mención especial para el Strange Tales Annual #2, una historia a cargo de Lee, Kirby y Heck que aunque resulta entretenida de leer, es sobre todo un punto de referencia para la naciente interrelación entre personajes: La Antorcha Humana y Spiderman comparten su primera de muchas aventuras.
La serie protagonizada por Peter Parker y llamada a ser una de las joyas de la corona de la editorial no ha empezado de manera brillante, pero sí mejor que otras contemporáneas. Destacan un montón de buenas ideas y conceptos sumergidos en un mar de historias que todavía no desatan todo el potencial del personaje.
A pesar de todo, ya tenemos por aquí a unos cuantos personajes secundarios inolvidables y nuestro protagonista ha ido evolucionando paso a paso con el paso de los números. Su trabajo como fotógrafo freelance y su naciente relación con Betty Brant son buena prueba de ello.
La colección muestra algunos de los tópicos de la época, como los espías comunistas (The Amazing Spider-Man #1) o los invasores alienígenas (The Amazing Spider-Man #2), algo que no beneficia en nada a una serie de corte tan realista dentro del género.
Por suerte, los autores pronto se olvidan de todo eso y nos brindan una serie de supervillanos de colorido diseño que se han convertido en auténticos iconos. Algunos con debuts muy discretos como El Buitre (The Amazing Spider-Man #2) o el Hombre de Arena (The Amazing Spider-Man #4) y otros brindando los mejores números del año, como el Dr. Octopus (The Amazing Spider-Man #3) o el Lagarto (The Amazing Spider-Man #6). También cabe destacar el enfrentamiento contra el Dr. Muerte (The Amazing Spider-Man #5), el primer villano que lucha contra otro héroe y que ayuda a reforzar la idea de universo compartido.
El álter ego de Tony Stark llegó pisando fuerte con una gran primera historia y uno de los mejores números de presentación que hemos tenido el placer de analizar (Tales of Suspense #39), a cargo de Stan Lee, Larry Lieber (sorprendentemente) y Don Heck.
Por desgracia, el gran potencial del personaje se ha ido diluyendo mes a mes, teniendo que soportar historias malas con tópicas amenazas alienígenas (Tales of Suspense #40), villanos desaprovechadísimos como el anecdótico Doctor Extraño o[3] sorpresa, comunistas (Tales of Suspense #41).
Si bien hay que reconocer que Robert Bernstein trató de probar otros aires nuevos para el personaje, la verdad es que estos no eran los más adecuados para él. Reinos subterráneos (Tales of Suspense #43) o viajes en el tiempo (Tales of Suspense #44) son cosas que uno esperaría ver en Fantastic Four, no en este serial. Por suerte, en el último tramo del año Stan Lee volvió a tomar las riendas y comenzó a sembrar pequeñas semillas para tiempos mejores. La incorporación de Pepper Potts y Happy Hogan como secundarios (Tales of Suspense #45) y la presentación de villanos, aún cargados de tópicos pero muy importante en el devenir del personaje, como Dinamo Carmesí (Tales of Suspense #46) y el Fundidor (Tales of Suspense #47) son buena muestra de ello.
Sin embargo, la auténtica revolución ha llegado justo en diciembre y aún nos encontramos sumergidos en ella. Sólo dos palabras: Steve Ditko. Uno de los padres de Spiderman realiza un trabajo que no siempre ha sido recordado como merece y nos cambia de arriba a abajo la imagen del personaje para los restos (Tales of Suspense #48). 1964 se presenta con más optimismo (y es que a peor no se puede ir).
De esta serie, siempre podrá hablar mejor cierto colaborador del proyecto experto en ella que yo. No hay mucho en lo que extenderse, pero más que nada porque tan sólo hemos podido disfrutar de cuatro números en 1963. Y sí, digo disfrutar porque a diferencia de muchas otras series esta empieza como un auténtico huracán. En este primer ejercicio de retrocontinuidad a lo bestia hemos podido conocer a un grupo de soldados único que vive sus aventuras llenas de socarronería en el terrible marco de la Segunda Guerra Mundial.
Stan Lee y Jack Kirby hacen notar que se encuentran muy a gusto realizando esta colección y nos brindan un primer número sin zarandajas y lleno de acción (Sgt. Fury #1), una aventura que muestra ese horror que fueron los campos de concentración (Sgt. Fury #2) y hasta la aparición de un joven Reed Richards (Sgt. Fury #3). La serie concluye el año de la manera más trágica, y asistimos a la primera muerte de un personaje protagonista en el Universo Marvel, ya que Jonathan "Junior" Juniper muere a manos de los nazis (Sgt. Fury #4).
En definitiva, una serie poco conocida en estos primeros tiempos y que para muchos, entre los que me incluyo, ha supuesto una pequeña gran sorpresa a reivindicar.
Creo que podríamos afirmar que el buen Stephen Extraño es, junto a Nick Furia y sus chicos, el personaje que ha conseguido llegar y besar el santo. Apenas bastaron dos historias de 5 páginas cada una (Strange Tales #110 y Strange Tales #111), a mitad de año, para presentar al personaje y su entorno, con elementos tan importantes como Wong, el Anciano, Pesadilla, Mordo, los viajes astrales, su amuleto y su mansión. Posiblemente la mejor presentación de un personaje hasta la fecha, todo ello apoyado además por un gran dibujo de Steve Ditko que cada vez irá a más.
Una vez ganada la cadencia mensual como serial en Strange Tales, hemos podido disfrutar de dos aventuras más. En una de ellas el personaje se enfrenta de nuevo al Barón Mordo (Strange Tales #114), quien está llamado a ser llamado uno de los peores rivales del Hechicero Supremo, cuya presencia se convertirá próximamente en una constante como la de Loki en Journey Into Mystery. En la otra, Lee y Ditko acaban por tirar la casa por la ventana del todo, y nos ofrecen otra gran historia con el cuidado origen del personaje (Strange Tales #115), un relato profundo y diferente a cualquier otro.
A pesar de partir con ventaja al haber protagonizado menos páginas que ningún otro personaje, creo que podemos decir que por toda la calidad que han logrado atesorar las mismas estamos claramente ante un material que es de lo mejor del año.
No comento nada al respecto de las protagonizadas por los Vengadores y la Patrulla-X porque apenas hemos visto dos números publicados y es difícil extraer conclusiones. Si alguien echa de menos un comentario sobre The Incredible Hulk, decir que no ha sido un despiste, sino que considero que Óscar Abellás ya dijo en su día todo lo que había que decir y no puedo añadir más. |
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